Descubre el producto que necesitas
Para tener una piel saludable a lo largo de los años, es fundamental que conozcas cuáles son los cuidados que necesita en las distintas etapas de la vida.
Para tener una piel saludable a lo largo de los años, es fundamental que conozcas cuáles son los cuidados que necesita en las distintas etapas de la vida.
Ahora que ya conoces tus necesidades, identificar tu tipo de piel es el segundo paso para poder elegir el tratamiento adecuado.
Las personas con la piel normal reaccionan positivamente a los diferentes productos o cambios climáticos. Tienen poros finos, buena circulación sanguínea, textura aterciopelada, suave y lisa. Es común sentirla firme y no presenta grandes líneas de expresión o arrugas.
La sequedad es causada por la falta de grasa en la piel y la puedes identificar, en la descamación, falta de suavidad y elasticidad en tu rostro. La deshidratación, se debe a que tu piel no retiene la humedad natural, por lo que puedes sentirla apretada, con una apariencia seca y con pequeñas líneas de expresión.
Si tu piel siempre parece estar brillante en todo el rostro, es posible que tengas piel grasa. Es muy común que a estas personas el maquillaje no les dure muchas horas y que a menudo necesiten secar distintas zonas de la cara.
Si tu piel está seca en ciertas áreas y grasa en otras, corresponde a una piel mixta. Es fácil de identificar, ya que suelen tener mayor brillo en la zona T, frente y nariz, y el resto del rostro normal.
A la hora de comprar, recuerda tener en cuenta tus necesidades y tipo de piel. En Falabella.com tenemos productos específicos para ti.
Paso 1: Limpieza
El primer paso para tener un rostro saludable, es tener una piel limpia. Esto permite desbloquear nuestros poros y preparar la piel para recibir los demás productos que utilicemos.
Paso 2: Tónico
Luego de limpiar la piel, es necesario un tónico para normalizar el cutis, hidratar, refrescar y cerrar los poros.
Paso 3: Serums
El sérum se encarga de tratar necesidades específicas de la piel, como las arrugas, el acné, las manchas, entre otras. Tiene un acabado ligero y no graso.
Paso 4: Contorno
La zona del contorno de ojos es la más delicada, por lo que requiere cuidados especiales. Este paso te ayudará a activar la circulación y descongestionar las bolsas. Evita aplicarlo en los párpados móviles y el lagrimal.
Paso 5: Hidratante
Las células y tejidos de la piel necesitan agua para defenderse de los factores externos. Por eso, es importante hidratarla tanto por fuera como por dentro. Encontrarás productos según tu tipo y necesidades de la piel.
Paso 6: Factor solar
Si no protegemos nuestra piel de los factores externos, como el sol, los demás pasos de cuidados no tendrán el mismo efecto. Es fundamental aplicar un producto con al menos 15 FPS, tanto en el verano como el invierno, dentro y fuera de la casa.
Paso 1: Desmaquillante
Antes de ir a dormir es imprescindible la limpieza facial. No solo para eliminar los restos del maquillaje, sino para retirar el sudor o suciedad acumulada durante el día. Recuerda hacerlo de manera delicada.
Paso 2: Mascarilla
Ayudan a regenerar y renovar la piel. Además, la mayoría cuenta con potentes activos para hidratar en profundidad. Se recomienda usar entre una y dos veces por semana.
Paso 3: Tónico
Luego de limpiar la piel, es necesario un tónico para normalizar el cutis, hidratar, refrescar y cerrar los poros.
Paso 4: Serums
El sérum se encarga de tratar necesidades específicas de la piel, como las arrugas, el acné, las manchas, entre otras. Tiene un acabado ligero y no graso.
Paso 5: Contorno de ojos
Cada noche utiliza un contorno de ojos para estimular la renovación celular, formación de colágeno y elastina. Si el producto no tiene aplicador, recomendamos hacerlo con el dedo anular ya que es el que menos fuerza tiene.
Paso 6: Tratamiento
Finalmente, la hidratación de la piel. Con los pasos anteriores, el efecto del tratamiento facial y cremas hidratantes que escojas, tendrán un impacto mayor. Es importante que identifiques el más adecuado para ti.